Tras observar problemas que se repiten de un simulador a otro, se decide:
-que sólo se activarán aquellos parlamentos donde haya partidos dispuestos a jugar
-que los que no se activen guardarán la representación de 2009 o levemente modificada, hasta su activación
Modo "pausa"
Cuando un partido no se vea capacitado para ocuparse de algún parlamento, podrá ponerse en modo "pausa", avisando en la cafetería del parlamento, lo que significará que nadie podrá echarles en cara abandonar el parlamento. Sus escaños se descontarán del total del parlamento, de modo que la mayoría absoluta será menor. Ej. El PSOE "pausa" sus 10 escaños en Navarra. En Navarra había un total de 50 escaños. Ahora la mayoría absoluta será de 21. En modo "pausa" no se suman puntos de cara a las elecciones, pero tampoco se restan. Si un partido no debate, restará puntos, lo que puede llevarle a no obtener representación en las siguientes elecciones. El modo "pausa" se quita avisando nuevamente en la cafetería del parlamento.
Grupo mixto
Todos los parlamentos contarán con un grupo mixto en el que habrá -por lo menos- cinco escaños sin asignar. Cada uno de estos escaños podrá ser ocupado por nuevos partidos que se hayan creado después de las elecciones. La administración decidirá de acuerdo con el trabajo diario de dichos partidos.
Los tres poderes: ejecutivo, legislativo y judicial
El Poder Judicial será el único que se mantendrá al margen de los jugadores. La administración juzgará cada caso de acuerdo con su criterio. Por cosas de poca importancia (ofensas, difamaciones, etc.) se dará la razón a uno u otro y repercutirá en la valoración del personaje y/o del partido, pero no habrá juicio.
El Poder Ejecutivo es muy importante: el gobierno necesita estar activo o el pueblo comenzará a enfadarse. Si algún ministerio (o consejería autonómica) está demasiado abandonada, se le plantearán problemas para que actúe, o traerá consecuencias perjudiciales para el gobierno y los partidos que lo compongan.
El Poder Legislativo es la parte más importante del simulador. En los parlamentos hay unas representaciones pero eso no influye más que en el resultado de las votaciones; la valoración de la administración se centrará más en la capacidad para debatir, argumentar y vencer dialécticamente al rival, que en el apoyo que logre una propuesta. Quien debata bien, subirá; quien debata mal o no debata, se la pegará bien fuerte.
El buen funcionamiento de un parlamento depende, en parte, de su presidente (¡ojo, el presidente del parlamento no es el presidente del gobierno ni de la comunidad!). Tiene que saber aplicar el reglamento, tiene que ser flexible con el tiempo de debate y tiene que ser justo. Quien cumpla con esto ayudará a que su partido mejore de cara a la ciudadanía. Por el contrario, un mal presidente de parlamento puede llevar al desastre a todos sus compañeros.
La calle
"La calle" es un lugar virtual en el que los políticos pueden celebrar actos y entrar en debates con cualquier otro político. Esto, que en la realidad no es posible, si lo es en el simulador, porque le da mucha jugabilidad. Además, los periodistas pueden intervenir para preguntar sobre cualquier asunto que se esté tratando. No responder a las preguntas de los periodistas puede bajar mucho la popularidad del político.
Los periodistas, además, colgarán en "La calle" las noticias que saquen, de modo que puedan generar debate.
Tu político
Nadie más que tú podrá decidir cómo va a ser tu personaje. Puedes decidir cuáles son sus estudios, cuál es su capacidad económica, con quién está casado (siempre que no sea otro jugador, sin que lo hayáis acordado, o algún personaje político importante). Ej. No puedes decir que estás casado con Bibiana Aido. Todos los datos sobre tu personaje tendrás que ponerlos en el archivo de jugadores. Algunos datos podrán ser utilizados por la administración en tu contra. Ej. Si decides que eres millonario, podremos "investigar" de dónde viene tu fortuna. Por ello es aconsejable ser un poco humilde y no inflarse el ego.
Cada jugador será valorado de acuerdo con sus actuaciones, lo que le hará subir o bajar en valoración. Un político muy valorado que encabece una lista electoral tiene más posibilidades de éxito que otro con menos valoración. Igualmente, la valoración puede ser decisiva, en caso de ruptura dentro del partido, para determinar cuántos militantes (y electores potenciales) se van con cada cual.
Personajes indirectos
Pertenecen al partido y los puede usar cualquier jugador autorizado por los dirigentes del partido. Serán valorados únicamente por su trabajo parlamentario.